Jesucristo, “toda deuda paga”[1].
Redención en San Pablo.
- La redención obra de Dios y de Cristo, a la que concurre el hombre.
Hubo algunos que oponían la justicia a la misericordia y la misericordia a la justicia, pero «Nos parecen vanos estos escrúpulos. San Pablo tuvo esmero en confrontar los dos aspectos de la obra redentora y en presentar las estrechas relaciones de ambos: “Nosotros somos justificados gratuitamente por la gracia de Dios, por medio de la redención que existe en Cristo Jesús. Dios lo propuso como propiciación por la fe, en su sangre, para mostrar ahora su justicia, a fin de ser (reconocido) justo y fuente de justicia para cualquiera que crea en Jesús” (Ro 3,24-26)[2]. Seguir leyendo