Las bodas del Cordero[1]
Venerunt nuptiae Agni et uxor eius praeparavit se (Ap 19,7). Han llegado las bodas del Cordero, y su Esposa está dispuesta.
Así debe sonar en el corazón de estas Hermanas que hoy hacen la profesión religiosa con votos perpetuos, y así debe resonar nuevamente todos los días de su vida, de manera especial, cuando solemnemente renueven sus santos votos. Palabras llenas de misterio que esconden el sentido, profundo y misterioso, de nuestra sagrada vocación. ¿Quién es el Cordero? ¿Quién es la Esposa? ¿Y de qué banquete de bodas se trata aquí? Seguir leyendo